En algún momento, perdí la inocencia.Se enturbió la mirada, se agrietó el carácter, me hice ateo en el amor, militante en el sarcasmo, rencoroso en el dolor, contagioso en la tristeza, acomodado en la fe, desertor de la esperanza.El espejo interior me devolvía sombras.Tú no te rendiste. Viniste a rescatarme.«Sal afuera», gritaste, y yo, de …
Archivo de marzo 2, 2025
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